Historia del Sport Buggy por su creador, Alberto P (APV)


Cuando tenía unos quince años un amigo de la familia que sabía mi pasión por los fierros, me llama un día y me dice que pase por la casa que me había guardado un articulo del diario La Nación(que aún hoy conservo) que seguro me interesaría. Pasé y me dio una pagina completa donde presentaban el Puelche y desde entonces me quedó prendido el gusto por estos aparatos. Pagina de La Nación,que se menciona en la nota
Con el tiempo, cada vez que pensaba en un buggy me desalentaban sus prestaciones, estas, me parecían muy limitadas y muchos años después pensé en realizar un proyecto de buggy con prestaciones mucho más deportivas.
Así fue que me fui a ver a un amigo, un gran mecánico y chasista de la vieja época Alfredito "el loco” Silva y le conté lo que quería hacer. El se encargo del chasis y me presento al “gallego”Fernández un gran carrocero, tambien de la vieja escuela que se encargó de la carrocería. (tanto “el loco” como “el gallego” participaron entre otros recordados autos del Trueno Naranja. Además Fernández se ocupó de la restauración del Halcón, La Garrafa y el F1 de Ramón Requejo.La garrafa Hizo también varias réplicas de cupecitas, algunas de ellas para el museo Fangio.
Silva realizo trabajos de carroceria y chasis a unos cuantos grandes de nuestro automovilismo como por ejemplo Roberto Mouras.F! de R.Requejo Partimos de un Buggy Burro, porque siempre me gusto y era más factible para adaptarse a los cambios que quería realizar. Y al cabo de unos 5 o 6 meses estaba el primer Sport Buggy armado, en el cual se fue trabajando para mejorar distintas cuestiones que siempre surgen al encarar un proyecto tan complejo como es un auto, aunque tenga la simpleza de un Buggy. Unos cuantos meses mas tarde se había logrado lo que yo esperaba,un buggy....que fuese realmente divertido para manejar. Les cuento que el auto aceleraba, frenaba y doblaba en forma fantástica, en la calle era muy pero muy divertido y en la arena era un tractorcito, gracias al chasis y a una leva que me hizo Antelo que le daba un torque fantástico a muy bajas rpm, eso te permitía pasar por el peor terreno a muy baja velocidad sin ningún riesgo de quedarte. Mientras estuve al frente de la firma, se fabricaron unos 4 autos completos y unos siete kits, que por lo que sé algunos de ellos se armaron, otros se usaron como para intentar generar nuevos proyectos y de otros perdí todo contacto.
Por falta de tiempo para dedicarme a full, es que decidí vender todo a alguien que tuviera las pilas que yo había perdido.Sport Buggy en su habitat natural....
Solo me quede con mi Sport, el de la foto, hasta que un día me hicieron una oferta muy buena y lo vendí y en el mismo momento que se lo llevaban me arrepentí de haberlo hecho.
Se que la gente que se hizo cargo del proyecto que inicie, aun fabrica y vende el Sport , pero me queda el consuelo de haber llevado a buen puerto, algo que había decidido hacer a los 15 años, cuando lei la nota de La Nación, construir un buggy con un concepto mas afín a mi gusto por los autos deportivos...